La correcta manutención de los extintores es imprescindible en la prevención de incendios en cualquier espacio, ya sea un hogar, una oficina o una instalación industrial. Una de las preguntas más frecuentes en este ámbito es: ¿cada cuánto tiempo se debe de hacer la carga y descarga de estos equipos? En Decopecho te damos la respuesta.
Carga y descarga de extintores: plazos aproximados
La recarga de un extintor debe ser realizada por personal cualificado y utilizando equipos especializados. En términos generales, se recomienda:
- Después de cada uso. Si el extintor ha sido utilizado, incluso parcialmente, debe ser recargado inmediatamente.
- Anualmente. Incluso si el extintor no ha sido utilizado, se recomienda llevar a cabo una recarga anual para garantizar que el agente extintor conserve sus propiedades y que el equipo esté listo para su uso en caso de emergencia.
- Según la normativa local. La normativa local puede establecer frecuencias de recarga más específicas.
¿De qué dependen los plazos?
La frecuencia de las revisiones y recargas de extintores no es única para todos los casos. Dependerá de diversos aspectos como:
- Tipo de extintor. La composición del agente extintor, la presión de trabajo y el diseño del equipo influyen directamente en la frecuencia de mantenimiento.
- Condiciones ambientales. La temperatura, la humedad y la exposición a agentes corrosivos pueden acelerar el deterioro de los componentes del extintor.
- Uso del extintor. Como acabamos de decir, si el extintor ha sido utilizado, incluso parcialmente, es necesario recargarlo inmediatamente.
- Normativa local. Cada país y región tiene sus propias regulaciones en materia de seguridad contra incendios, las cuales establecen los requisitos mínimos para el mantenimiento de los extintores.
Revisiones periódicas independientemente de la frecuencia de recarga
Los extintores deben ser sometidos a revisiones cada cierto tiempo para verificar su estado y garantizar su correcto funcionamiento. Estas revisiones incluyen:
- Inspección visual. Se examina el estado general del extintor, la integridad del cuerpo, la ausencia de fugas y el correcto funcionamiento de las válvulas y mecanismos de disparo.
- Comprobación de la presión. Se mide la presión interna del extintor para asegurarse de que se encuentra dentro de los límites establecidos por el fabricante.
- Verificación del peso. Se pesa el extintor para cerciorar que la cantidad de agente extintor es la adecuada.
- Revisión de la etiqueta. Se verifica que la etiqueta del extintor esté legible y que contenga toda la información necesaria, como la fecha de fabricación, la fecha de la última recarga y las instrucciones de uso.
Venta, carga y descarga de extintores en Ordes
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